Tratamiento Farmacológico y Quirúrgico de Enfermedad Arterial Periférica
La Enfermedad Arterial Periférica (EAP) es una condición común en la que las arterias se estrechan debido a la formacion de “placas”, reduciendo el flujo sanguíneo a las extremidades, principalmente las piernas. Esto puede causar dolor al caminar y otros síntomas relacionados con una insuficiencia de oxígeno en los músculos.
Síntomas más comunes
- Dolor en las piernas al caminar (claudicación intermitente).
- Calambres o dolor muscular en piernas y brazos durante el ejercicio, que en etapas iniciales desaparecen en reposo.
- Sensación de frío o debilidad en las piernas.
- Entumecimiento o pulso débil en las extremidades.
- Dolor intenso en reposo en etapas avanzadas.
Factores de riesgo
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Tabaquismo
Diabetes
Obesidad
Hipertensión
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Historial familiar
De enfermedad arterial periférica, enfermedades cardíacas o accidentes cerebrovasculares.
Colesterol Alto
Edad avanzada
(Más de 65 años o mayores de 50 con factores de riesgo).
Complicaciones posibles
- Isquemia crítica en las extremidades: Muerte del tejido debido a la falta de riego sanguíneo, con riesgo de amputación.
- Accidente cerebrovascular o infarto: La ateroesclerosis afecta también a los vasos del cerebro y corazón.
Tratamiento
El tratamiento busca controlar los síntomas y prevenir complicaciones graves, como ataques cardíacos o accidentes cerebrovasculares, asi como aquellas relacionadas a la extremidad afectada como son las amputaciones. Esto puede incluir:
Cambios en el estilo de vida:
Dejar de fumar, hacer ejercicio, y llevar una dieta saludable.
Medicamentos:
Para controlar los factores de riesgo, como la hipertensión o el colesterol alto.
Procedimientos quirúrgicos como parte del salvamento de la extremidad afectada:
Angioplastia y colocación de estent:
Para ensanchar las arterias
Cirugía de bypass:
Para crear una nueva ruta de circulación sanguínea
Terapia trombolítica:
Para disolver coágulos sanguíneos en situaciones agudas
La clave en el manejo de la Enfermedad Arterial Periférica es la detección temprana, el control oportuno de los factores de riesgo asi como el tratamiento adecuado.
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Contenido Sensible
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Lesiones por Enfermedad Arterial Periférica previo a tratamiento
La Enfermedad Arterial Periférica (EAP) es una afección en la que las arterias que llevan sangre a las extremidades (principalmente a las piernas) se estrechan o bloquean debido a la acumulación de placas de grasa (aterosclerosis).
Esta reducción del flujo sanguíneo puede causar una serie de síntomas y complicaciones graves como:
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Claudicación:
Dolor, calambres o debilidad en las piernas o glúteos al caminar o subir escaleras, que suelen aliviarse con el reposo.
Dolor en reposo:
Dolor persistente en las extremidades, que puede ocurrir incluso cuando la persona está en reposo.
Heridas que no cicatrizan:
Úlceras o heridas en los pies o piernas que tardan en sanar.
Cambios en la piel:
Piel pálida, fría o con un tono azulado en las piernas.
En Endovascular Clinic, ofrecemos un enfoque integral para el diagnóstico y tratamiento de la enfermedad arterial periférica, que incluye:
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Evaluación y diagnóstico:
Utilizamos pruebas de imagen avanzadas, como el ultrasonido doppler duplex y angiografías, para evaluar el flujo sanguíneo y determinar la gravedad de la enfermedad.
Modificaciones en el estilo de vida:
Recomendaciones sobre dieta, ejercicio y control de factores de riesgo como la hipertensión, diabetes y el colesterol alto.
Terapias médicas:
Prescripción de medicamentos para mejorar la circulación, controlar el dolor y reducir el riesgo de complicaciones.
Intervenciones mínimamente invasivas:
Procedimientos como la angioplastia (dilatación de la arteria) y colocación de stents para abrir arterias bloqueadas.
Cirugía vascular:
En casos más severos, se pueden realizar bypass o cirugía de revascularización para restaurar el flujo sanguíneo.
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Nuestro equipo de especialistas en Cirugía vascular, Cardiología, Medicina interna, Neurologia y Ortopedia trabaja en conjunto para brindar un tratamiento personalizado, con el objetivo de mejorar la calidad de vida del paciente y prevenir complicaciones graves como amputaciones.